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Las formas creativas del amor

22145450_sCreo que lo mas importante de la coyuntura política actual en nuestro país es la puerta que se abre para hablar de paz.  Al final, no se trata de que votemos por el sí o por el no, sino que empezamos una nueva dinámica que no se veía hace mucho tiempo.  El hecho de que se hable de silenciar los fusiles, de una nueva esperanza, de perdón, de nuevas formas de resolver nuestros conflictos etc…es lo más valioso y lo que debemos aprovechar al interior de nuestras comunidades.

La paz no la hacen unas personas sentándose a dialogar únicamente.  Eso es una negociación, un medio para iniciar esos caminos de paz.  Estamos en pañales, de ahí falta mucho para alcanzar la meta.  Pero lo importante es que se abre el espacio para lo que si hemos necesitado como sociedad y es la transformación de nuestros corazones al amor.

La paz comienza en casa y es ahí donde debemos trabajar. Vivimos en una sociedad violenta.  Resolvemos nuestras diferencias a los puños, mechoneos y balazos.  Estigmatizamos a las personas, juzgamos las diferencias y no tenemos tolerancia a nada que pueda afectar nuestra comodidad.  Altos índices de violencia intrafamiliar, abuso infantil, peleas al interior de los centros educativos, asesinatos, riñas.  La forma como respondemos, es violenta en muchos de los casos.

Creo que hay varios temas que podríamos trabajar con nuestros hijos, alumnos, colegas, clientes:

  1.  No ser indiferentes.  La indiferencia es lo contrario al amor.  Si no me importa el otro, ni siquiera lo miro.  Los conflictos empiezan por ahí.  Nos debe doler el otro en su pobreza, en su indigencia, en su falta de oportunidades.  La discriminación debe ser erradicada de nuestro vocabulario y de nuestra vida.  Ni por raza, ni por condición económica ni por religión ni por preferencia sexual.  Todos somos seres humanos dignos de respeto y consideración.  Toda vida es valiosa.
  2. Resignificar el lenguaje.  Aunque parece algo insignificante, creo que es de la mayor importancia volver a dar al lenguaje su verdadero significado y a la palabra su altísimo valor.  Saber que cuando utilizamos un lenguaje soez, aunque sea lo común o lo de moda, es ofensivo.  Cuantos malos entendidos se evitarían si nombráramos las cosas como son y aprendiéramos a comunicarnos con palabras amables y amorosas.  Decir lo que nos molesta sin violencia y honrar nuestra palabra cumpliendo lo prometido.
  3. No juzgar. Tal vez de lo más difícil es no juzgar las acciones de los demás a priori.  Siempre nos metemos en la mente del otro y opinamos sin conocer sus intenciones, sus circunstancias ni lo que verdaderamente quería esa persona.  Juzgamos con varas altas, de maneras que ni nosotros mismos podríamos cumplir.  Fácil es juzgar sin involucrarse, fácil es mirar atrás y decir lo que se debió hacer y más fácil aún es hablar sin haberse comprometido.  Creemos que sabemos mucho, cuando no sabemos nada.  Pues cada persona es única en su actuar y su pensar y ponerse en los zapatos del otro no es posible, es tan solo una expresión lingüística coloquial.
  4. Perdonar.  Reconocer los errores propios y los ajenos.  Solo cuando empezamos a reconocernos unos a otros como seres humanos, con necesidades y deseos individuales, con carencias y debilidades, podemos comprender el hecho de que todos cometemos errores.  No significa esto que debamos dejar pasar todo y que nos convirtamos en «ovejas mensas» sino que busquemos formas creativas de resolver nuestras diferencias y seamos lo suficientemente humildes como para aceptar nuestros errores y pedir perdón.  Es adicionar esa palabra a nuestro vocabulario y poner nuestra voluntad al servicio de un nuevo lenguaje del amor donde podamos solucionar los conflictos y dar espacio al que me ofende para que vuelva al camino correcto.  Todos tenemos la potencialidad de cambiar y enmendar.  Hay que volver a confiar en el ser humano.

Estas son unas pocas sugerencias, pero queda la reflexión y la tarea de buscar formas de interactuar llenas de esperanza, alegres, con una mirada puesta en un futuro lleno de paz que nos mueva a ser mejores seres humanos.  El perdón es una de esas formas creativas del amor que llevan a la paz interior y a la libertad y que devuelven la humanidad tanto al ofensor como al ofendido.

Espero sus comentarios…cropped-logo-en-jpg2.jpg

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